Receta Tarta Guinness

Irlanda es famosa por muchos aspectos distintos que abracan desde los paisajes o la música a la literatura o su cerveza. Pero no precisamente por su gastronomía. No es demasiado justa esta idea ya que a pesar de no tener una amplísima gama de variedades culinarias, como sucede en la franja mediterránea, sí que es cierto que cuando hacen algo, lo hacen bien.

Ejemplo de ello es su cerveza. La Guinness es mundialmente conocida por su sabor fuerte y seco. Si nos interesamos un poco veremos que tiene un aroma a café y ligero sabor a regaliz. Los expertos en maridajes la recomiendan como bebida ideal para los postres, pues de ello los irlandeses han hecho un ingrediente básico en su cocina.

Os vamos a dejar una receta, experimentada por nosotros, que nos ha gustado y no es demasiado difícil de hacer.
La tarta se prepara en 2 partes, el bizcocho por un lado y el frosting por otro.
Ingredientes para el bizcocho:
– 250 ml de cerveza Guinness
– 250 gr. de mantequilla
– 75 gr. de cacao en polvo
– 400 gr. de azúcar
– 250 gr. de harina
– 2 y 1/2 cucharadas pequeñas de bicarbonato (si queréis podéis sustituirlo por 1 sobre de levadura química)
– 140 ml. de nata líquida 35% MG
– 2 huevos

Para el frosting: 300 gr. de queso de untar, 150 grs. de azúcar glass y 360 ml. de nata líquida 35% MG (para montar)
Pasos:
1- Calentamos en una olla la cerveza, sin que llegue a hervir.
2- Añadimos la mantequilla y dejamos que se deshaga, es más fácil y rápido si la echáis en daditos.
3- En un bol ponemos el cacao, la harina, bicarbonato y el azúcar y mezclamos hasta que quede de un color uniforme.
4- En otro recipiente batimos la nata y los huevos hasta que quede bien ligado y añadimos el contenido de la olla (la mantequilla con cerveza).
5- A esto poco a poco le iremos incorporando la mezcla que ya teníamos hecha (cacao, bicarbonato, harina y azúcar)
6- Engrasamos y enharinamos el molde de tarta y echamos la masa.
7- Lo metemos en la bandeja del medio del horno, que debe estar a 180 grados, y tardará en hacerse 45-50 minutos aproximadamente.
Frosting:
1- Mezclamos el queso con el azúcar hasta que no quede ningún grumo, tiene que quedar una pasta homogénea.
2- Montamos la nata y lo mezclamos todo.
*Si sois de los golosos que os gusta mucho el frosting podéis cortar el bizcocho a la mitad (en horizontal) y rellenar esa parte también.

Por supuesto que aunque la hagáis en casa, sabe mejor en su lugar de origen. Hay que ir a Irlanda para probarla 🙂

BUEN PROVECHO!!!!